AENA ha insistido en que el incidente de nulidad al Supremo era un trámite previo y necesario para desarrollar el recurso de amparo al Tribunal Constitucional.
Desde la entidad pública, José Sanz el director adjunto de Barajas afirma que la sentencia se ha cumplido con las diferentes medidas que desde el año 2003-2004, periodo concreto al que se refiere el dictado del Supremo sobre la Ciudad Santo Domingo de Algete.
Este es el objetivo de AENA demostrar ante el tribunal que los límites del ruido están muy por debajo de lo que establece la ley del ruido, es decir los niveles medios de cada día se cumplen hasta en el 97 por ciento de los casos, lo que no evita que de forma puntual y anecdótica se sobrepasen. José Sanz.
Entre las medidas para reducir el impacto del ruido AENA ha explicado su Plan de Aislamiento Acústico de las viviendas afectadas, más de 12.500 en todo el norte de la región, el sistema de monitorados de ruidos, la retirada de los aviones más ruidosos o una mejor precisión en las trayectorias de aterrizaje y despegue.
AENA ha recordado que el aeropuerto genera 42 mil puestos de trabajo, el 9 por ciento del empleo de la región y más de 10 millones de euros, el 11% del Productor Regional Bruto. Cada aterrizaje o despegue genera 10.900 euros en la Comunidad de Madrid.
Por tanto valoran estas cifras por encima de las pequeñas molestias de unos pocos vecinos, aunque siempre intentando que esta afección sea la menor posible y cumpliéndose la directiva europea sobre ruido.
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