La semana pasada una máquina realizó las primeras calas para determinar con exactitud la profundidad de una de las tuberías de agua que atraviesa la zona. Sin embargo, hasta primeros de febrero no comenzarán las obras en la Avenida de Barajas. En una primera fase, Sacry realizará trabajos en el interior de la zona vallada, mientras que en una segunda se conectará el nuevo ramal.
Al final de las obras el carril izquierdo conducirá hasta la glorieta; mientras que el derecho de la vía de servicio, a la altura de la parada de autobús, se prolongará hasta convertirse en el ramal directo hacia Madrid como afirma Ramón Cubián, concejal de Obras.
En cualquier caso, no está previsto cortar la circulación de vehículos por la vía de servicio; aunque se producirá un estrechamiento de carriles al final de la dicha vía, adecuadamente señalizada. Asimismo, se mantendrá abierto el paso de peatones que cruza hacia el instituto Giner de los Ríos.
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