Castaño es por justicia un emblema del balonmano madrileño. Representa los mejores valores de la cantera alcobendense: el sacrificio, la entrega, el compañerismo o el trabajo. Armas que le convirtieron en su día en un referente del primer equipo de la entidad, al que llegó tras recorrer todos los equipos de base desde que con 11 años empezara en este deporte. Entre otros muchos hitos, protagonizó tres ascensos a la ASOBAL. A pesar de su retirada de las pistas hace dos años, Ángel continuó ligado al cuerpo técnico del club como entrenador de cantera, papel de entrenador que también desempeña desde los 18 años con diversos equipos. Ahora, sin embargo, ha decidido volver a las pistas.
Ángel Castaño regresará esta temporada con el conjunto de División de Honor B, que comienza la liga en septiembre. El objetivo del equipo es lograr el ascenso. De conseguirlo, sería la cuarta vez para Castaño.
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