La Comunidad de Madrid firmó con los ayuntamientos de toda la región convenios para poner en marcha las Brigadas Especiales de Seguridad de la región, BESCAM. Los convenios acordaban que era el gobierno regional quién asumía una financiación de un máximo de 40.000 euros por policía y año para gastos salariales y otros 6.000 euros para equipamiento, armamento, vehículos y otros gastos.
Según la Unión Nacional de Jefes y Directivos de Policía Local, UNIJEPOL la reducción en los últimos años de estos importes económicos junto con la intención del gobierno regional de reducir esta subvención a la mitad va a traer “importantísimas consecuencias para los municipios, las policías locales y la seguridad en general.
Serán los ayuntamientos, muy castigados económicamente por la crisis económica, quienes tendrán que asumir el coste restante. Para el presidente de UNIJEPOL, Francisco Cano la situación es más grave en los pequeños municipios de la región, especialmente aquellos que parten de una situación complicada como Algete.
El ayuntamiento de Algete, gobernado por el Partido Popular y uno de los municipios más endeudados de la zona norte de Madrid, no ha querido plantear su posición en este asunto hasta que no se clarifique la decisión desde la Comunidad de Madrid.
El alcalde de Manzanares El Real, el socialista Oscar Cerezal ha afirmado en Hoy por Hoy Madrid Norte que tras priorizar esfuerzos y gastos, la economía del ayuntamiento no va a poder afrontar los 200.000 euros que supondría la retirada de la subvención regional para los cinco agentes con los que cuenta el municipio.
Desde UNIJEPOL, temen que los ayuntamientos se vean obligados a despedir a otros trabajadores públicos que no son funcionarios para mantener las BESCAM. Una situación que obligará además a restringir equipamientos para la policía y por tanto seguridad ciudadana.
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