Prohibición estricta de fumar en el lugar de trabajo y parcial en los bares y locales de ocio. Con la Ley Antitabaco de 2006 se esperaba reducir el número de fumadores. Sin embargo, lejos de conseguirlo, los consumidores habituales de tabaco han aumentado.
Lo han hecho en un 6’68% durante este año. Así, y según la Encuesta Europea de Salud 2009 la tasa de fumadores ha pasado del 29,5% al 31,5%.
Para muchos expertos este fracaso se debe a la flexibilidad de la norma en bares y locales, ya que aquellos de menos de 100 metros cuadrados de superficie podían elegir si permitir o no fumar en el interior.
Desde la Comisión Nacional de Prevención del Tabaquismo argumentan que, al no haber una prohibición total, no se ha desanimado a los nuevos fumadores.
También, desde Grupo Español de Cáncer de Pulmón se apuesta por una restricción más estricta y argumentan que el incremento de consumidores de tabaco se encuentra entre los jóvenes.
Una prohibición total, añade la Comisión para prevenir del tabaquismo, se notaría también en los hogares donde, según el Instituto Nacional de Estadística, un tercio de los niños se ven expuestos al humo del tabaco de los padres que fuman delante de ellos.
Así las cosas, los expertos apuestan por la intención del Gobierno para 2010 de prohibir completamente fumar en los espacios públicos cerrados, incluidos todos los bares y restaurantes.
De aprobarse esta medida, sin duda más estricta, los fumadores tendrán que resignarse a tomarse el café sin el cigarro, y apagarlo mientras estén en el bar a partir de junio del año que viene.
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