Ante la aparición en nuestro país de varios casos de alergias producidas por esta sustancia, el Ministerio de Sanidad y Consumo acordó iniciar un procedimiento para prohibir la comercialización de calzado, sillones y cualquier artículo que pueda estar en contacto con la piel y que contenga esta dimetilfumarato. Esta sustancia química se utiliza para evitar algunos tipos de hongos y se presenta habitualmente en bolsitas, de aquí que el consistorio colmenareño arranque esta campaña en zapaterías, comercios de piel y en tiendas chinas, como explica el concejal de seguridad, Alberto Álvarez.
En contacto con la piel de este fungicida puede entrañar un riesgo para la salud, provocando alergias en forma de eczemas, a veces, muy difíciles de tratar. Su grado de toxicidad varía en función de la rapidez y de la cantidad que contenga cada bolsa. Por ello, el Instituto Nacional del Consumo ha recordado que la utilización de esta sustancia como fungicida está prohibida, ya que no está incluida en la Directiva Europea ni en la normativa española.
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