El Mercado de Abastos de Colmenar Viejo se modernizará para revitalizar el comercio tradicional, alojar un restaurante y convertirse en un singular espacio de degustación gastronómica. El objetivo es transformar el mercado en un enclave vivo que dinamice el casco histórico de la localidad a través de la actividad comercial y la hostelería, como señala el alcalde, Miguel Ángel Santamaría.
Se trata de un proyecto ambicioso con el que se pretende despertar este edificio emblemático y transformarlo en un mercado vivo, donde los vecinos puedan ir a comprar a puestos tradicionales de alimentación como hasta ahora pero también a comer, a tomar un café o el aperitivo, a degustar productos frescos o a asistir a una cata o a una charla sobre el mundo del vino, por ejemplo. Todo con una filosofía similar a la del Mercado de San Antón o de San Miguel de Madrid, para que active la vida del corazón del municipio.
El Mercado de Abastos, ubicado en la Plaza de Eulogio Carrasco, abrió sus puertas hace aproximadamente medio siglo y, en sus orígenes y durante muchos años, fue el único y más importante foco de actividad comercial de la localidad, el lugar que reunía en un mismo espacio a decenas de comerciantes que vendían todo tipo de alimentos perecederos, como carnes, pescados, frutas, verduras u hortalizas.
El proyecto ha sido presentado por el alcalde y diseñado por RyA Residencias, la empresa que aspira a hacerse cargo del proyecto y de la explotación del mercado en régimen de concesión. Una actuación que afectará tanto a la propia arquitectura del inmueble como a las funciones de cada una de sus plantas.
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