Jarama Vivo denunció la situación en el año 2007, y en esos meses la empresa retiró 170,9 toneladas de tierras contaminadas, 620 kilos de envases de plástico contaminado, 5,42 toneladas de lodos de agua y aceite de vehículos, 61 neumáticos, 9 depósitos de 1.000 litros de derivados oleaginoso del petróleo, probetas de hormigón o hasta incluso baterías de vehículos. Todo ello enterrado en los huecos de la explotación minera y en contacto con el nivel freático.
Ahora la Audiencia Provincial de Madrid ha condenado al ingeniero responsable en la empresa Norfesa S.L a dos años de prisión, multa de un año e inhabilitación de tres para el desarrollo de actividades ligadas a residuos por un delito contra el medio ambiente. La empresa además deberá reparar el daño causado. En el procedimiento, Ecologistas en Acción ha ejercido como acusación particular.
La actividad ilegal se producía en el paraje Solana de la Galga. La empresa del Grupo Minero Alonso, fue condenada en abril de 2014 por actividad ilegal de extracción, con grave daño al medio ambiente en parcelas contiguas a las que usaban como vertedero ilegal.
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