El condenado mantuvo una relación sentimental de febrero a junio de 2013 con la menor, que hoy tiene 15 años. Durante todo ese tiempo y aún después de dar por terminada la relación, la sometió a continuas agresiones, imponiéndola una constante situación de acoso. Los episodios de violencia se repitieron de forma continuada durante meses. El joven esperaba a la chica a la salida de su instituto en San Sebastián de los Reyes parta hostigarla ejerciendo sobre ella una dominación extrema.
Sólo un ejemplo de este acoso. El 4 de octubre de 2013 el procesado esperó escondido a la salida del centro educativo. Al ver a su ex novia, la abordó por sorpresa, le arrebató sus pertenencias y obligó a la menor a ir hasta el domicilio de ella en Alcobendas. Una vez dentro, cuando ambos se encontraban solos, el condenado le agredió propinándole patadas y puñetazos.
El joven ha sido ahora condenado a tres años y nueve meses de prisión por dos delitos de maltrato y otro de maltrato habitual. La Fiscalía pedía 21 años de cárcel.
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