La investigación se inició el pasado mes de octubre, cuando la Guardia Civil detecta una similitud idéntica de este grupo con otro desmantelado ese mismo mes e integrado también por ciudadanos georgianos. Ambos conocían a la perfección los hábitos de los habitantes de las viviendas seleccionadas para el robo que después perpetraban con métodos como el bumping – que consiste en la apertura de los cilindros de la cerradura mediante el golpeo de una llave tipo Bump y que era el más utilizado-, el resbalón o la ganzúa.
Los lugares elegidos para robar eran pisos de bloques de viviendas de altura elevada en zonas residenciales de clase media, donde uno de los integrantes del grupo criminal marcaba si la vivienda estaba ocupada o no. En pocos minutos se hacían con suculentos botines, siendo su predilección las joyas y el material informático.
Hasta el momento se le imputa la participación en una veintena de robos cometidos en Madrid, Tres Cantos, Las Rozas, Valdemoro, Humanes de Madrid así como la provincia de Guadalajara. Los agentes están investigando su posible vinculación en otro centenar de casos similares.
Los cuatro integrantes del grupo son de origen Georgiano, estaban asentados en Alcobendas, en cuyos domicilios la Guardia Civil ha intervenido varios kilogramos de joyas, material informático, los vehículos utilizados para la comisión de los robos, documentación falsa, herramientas para forzar las puertas y un revolver que se encontraba municionado.
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