El cuadro se pintó para un miembro de la corte, el montero del rey, Pedro de Arce y en él se ve el estilo más maduro de Velázquez, como muestra su pincelada o la perspectiva del área, además, del juego de miradas de los personajes, que recuerda a Las Meninas.
Con Daniel Verdú Schuman, profesor de Historia del Arte de la Universidad Carlos III, conocemos más cosas del pintor y la obra, en el contexto del segundo siglo de oro en España, bajo el reinado de Felipe IV. Decadencia de un imperio, pero auge artístico y cultural, con un Velázquez de poca obra, pero de gran calidad, intelectual y profundo.
Comentarios