Ambos volúmenes provienen de dos donaciones realizadas por la Organización Nacional de Ciegos al Archivo Municipal del Ayuntamiento. Constan de 150 páginas impresas lenguaje Braille y que han sido incluidos en el catálogo bibliográfico de la ONCE.
Los libros de Laureano Montero y de Leopoldo Jimeno fueron impresos en 1890 y 1892, respectivamente, y están custodiados por el archivero municipal, Santiago Izquierdo, aunque a disposición que quienes quieran consultarlos.
Se trata de las crónicas locales más antiguas que se conservan en San Sebastián de los Reyes y narra la vida del municipio en finales del siglo XIX, que era como la de muchos otros pueblos castellanos agricultores y ganaderos.
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