Estas tres personas fueron contratadas como personal laboral al igual que sucede, por ejemplo, con los jardineros. Sin embargo, ejercen como agentes sin ni siquiera ser funcionarios. Algo que lleva ocurriendo desde hace casi dos décadas y que, de momento, aún no se ha arreglado. Unos supuestos agentes que no sólo ponen multas o tramitan atestados. También tienen uniforme, identificación o vehículo policial. Una situación laboral que saltó a la luz hace un año y que sigue sin regularizarse.
Este jueves en Colmenar Viejo el juez tomará declaración, entre otros, al anterior alcalde de Miraflores de la Sierra, el popular Pablo Altozano, además de a los propios implicados. Una vista, tras una denuncia de uno de los propios agentes del cuerpo de Policía Local, que podría determinar la celebración de un juicio por este asunto. Todo dependerá de cómo se justifica el tener y haber tenido a tres personas ejerciendo funciones de policías sin serlo.
En caso de prosperar judicialmente el caso, según fuentes consultadas por SER Madrid Norte, los tres ‘falsos agentes’ podrían ser imputados por usurpación de funciones públicas, hecho castigado con una pena de prisión de uno a tres años, y los responsables políticos por prevaricación.
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