Aquella leyenda de que la memoria basta para superar los tests de conducir se trastoca con el nuevo examen, ya que los cambios en esta prueba teórica son notables. A priori, la base de preguntas pasa de 800 a 15.500 y la formulación es aleatoria, un sistema que se implantará definitivamente en toda España durante 2014. Asimismo, el examinado ha de contestar 30 preguntas en 30 minutos y se permiten tres fallos como máximo. En la cuestión práctica, son 25 minutos como mínimo donde no sólo se valora el manejo del coche y la circulación por la ciudad, sino que el examinador podrá exigir que se verifiquen la dirección, los frenos, los niveles de aceite, los faros o la posición de espejos, asientos o reposacabezas. Como novedad, durante diez minutos se controla la “conducción autónoma”: el examinador indica un destino y, sin más instrucciones, el aspirante debe dirigirse allí. Durante los otros 15 minutos, la conducción es guiada como hasta ahora. La finalidad es que se conozcan bien las normas y lo que implica ir al volante de un vehículo. José Blas es el dueño de Autoescuela Merinero.
Si bien algunas modificaciones ya estaban desarrollando en algunas jefaturas de Tráfico como experiencia piloto, ahora se generalizan y los nuevos requisitos para obtener el permiso de conducir entran en vigor. En la web de la DGT, www.dgt.es, hay un modelo de examen para practicar la autoevaluación. Un paso más para preparar el momento de sentarse al volante, que requiere aguzar todos los sentidos.
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