“¿A qué no han renunciado los madrileños a pesar de la crisis?”. Es la pregunta del “Barómetro de la crisis”, un estudio que revela que pasear e ir de cañas son los planes favoritos de los madrileños que permanecen en su lugar de residencia en verano. Y es que desde 2009 se ha duplicado el número de personas de toda la región que renuncia a salir de vacaciones a causa de la crisis económica, de modo que las alternativas de ocio aumentan. Y si estos días hablábamos del incremento en la afluencia a las piscinas de la Comunidad de Madrid con respecto al año pasado, también sabemos que más del 60% de los ciudadanos valora salir a tomar cerveza como un momento fresco y feliz este verano. Le siguen con un 54% el “Viajar en vacaciones”, con un 53% “Salir a cenar con la familia y amigos”, con un 52% “Salir a comer con la familia y amigos”, con un 51% “Ir al cine” y con un 45% las “Excursiones de fin de semana”. En torno al 30% se puede permitir ir al teatro, a conciertos o salir de copas”. Es el resultado de la pregunta: “¿A qué no han renunciado los madrileños a pesar de la crisis?”.
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