Como entona la célebre canción, “Fumando espero”… No, mejor no animarse… “Fumando espero” es el nombre del primer club de fumadores de la Comunidad de Madrid, el tercero de España, que se encuentra en Soto del Real y tiene ya más de cien socios, además de lista de reserva. Ante la nueva situación derivada de la Ley Antitabaco, que prohíbe fumar en los bares y restaurantes de todo el país, varios ciudadanos han decidido crear su propio foro en torno al tabaco. Antonio Mayoralas es el vicepresidente del club.
“Fumando espero” tiene sus instalaciones en el Hotel Prado Real y no pretende ser un fumadero cualquiera, sino que organiza distintas actividades.
La cuota de inscripción, de diez euros anuales, se utiliza para pagar los gastos del club y las iniciativas: degustación de tabaco, charlas, terapias para fomentar buenos hábitos, partidas de cartas y mucha expectación, sobre todo los fines de semana, con una alternativa de ocio muy atractiva.
A partir de ahora, Soto del Real no sólo será conocido por su inconmensurable patrimonio cultural, sino también por el club “Fumando espero” que, dicho sea de paso, no puede vender ningún producto ni contratar a nadie según la ley. Curiosamente, los artífices de esta idea son exfumadores, pero hacen esto por una cuestión de tolerancia… y por pasarlo bien sin cortapisas.
¡Vaya polémica con la Ley Antitabaco, con lo fácil que es dejar de fumar! Ya lo decía Mark Twain: él lo dejó como unas 100 veces...
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