Un verano más, para ahorrar costes, la Consejería de Sanidad no está sustituyendo al personal médico y sanitario que se va de vacaciones. Así, se han clausurado dos plantas de hospitalización con casi 60 camas, lo que ha provocado la saturación del servicio de urgencias, en el que se acumulan los pacientes durante 3 y 4 días a la espera de una cama libre.
Según el portavoz de Izquierda Independiente, Rubén Holguera, el modelo privatizador de la sanidad pública en la Comunidad de Madrid perjudica gravemente a la población gracias a la colaboración de los ayuntamientos populares de la región que callan y miran para otro lado.
A estas deficiencias del Infanta Sofía, se suman las que Izquierda Independiente ha denunciado en numerosas ocasiones: la falta de UVI Pediátrica o Cardiológica, la derivación de pacientes a La Paz en los servicios de Neurocirugía o Cirugía Vascular, así como a los de Otorrinolaringología y Oftalmología en horario de tarde y fines de semana.
Sin embargo, la Consejería de Sanidad desmiente los hechos. Afirma que no se ha cerrado ninguna planta y que todas las camas están a disposición de utilizarse en cualquier momento. Además, dice que es falso que los pacientes estén en urgencias 3 días, que desde que llega hasta la primera valoración no supera los 5 minutos y que es atendido por un facultativo en 45 minutos.
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