UPyD pedía la modificación de la ley de bases de régimen local para que los sueldos de los cargos públicos en los ayuntamientos se fijasen a través de una serie de criterios fijos y evitar, en cualquier caso, que haya alcaldes que cobren más que el presidente del Gobierno. Entre otras cosas, desde el partido rechazan que cada corporación fije su retribución al inicio de cada legislatura de forma arbitraria. Sin embargo, la propuesta fue rechazada.
Los tres alcaldes de la región que más cobran son Ana Botella, con 101.000 euros anuales, Ignacio García de Vinuesa, con 97.000, y Bartolomé González, con 90.500.
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