En un pleno plagado de irregularidades, como no tener un Secretario cualificado para levantar acta, Izquierda Unida – Los Verdes denuncia que el suministro de agua del grifo no está tratada con cloro en ciertas zonas de la localidad, incumpliéndose los criterios para el consumo humano. Un atentado contra la salud pública como señala su portavoz, James Bényei, que tiene su origen en una política urbanística salvaje e insostenible.
El agua no tratada proviene de pozos que en un futuro gestionará el Canal de Isabel II. Pero según los informes elaborados por la empresa Inti para el Ayuntamiento de Guadalix de la Sierra, dichas aguas son aptas para el consumo, como ha explicado el alcalde, Ángel Luis García Yuste. Quien no ha querido conceder declaraciones a Ser Madrid Norte, aunque sí ha afirmado que esta incertidumbre no es buena para la ciudadanía. Asimismo, critica que no es ético el comportamiento de IU por levantar falsas alarmas entre la población. Sin embargo, Izquierda Unida –Los Verdes ha aportado a esta redacción el resultado de los análisis privados realizados en la finca de una vecina.
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