Otra de las recomendaciones para disfrutar de un baño seguro es evitar entrar de golpe en el agua para que no se produzcan cambios bruscos de temperatura corporal y accidentes, respetar los tiempos de digestión y evitar el baño después de una exposición prolongada al sol o un ejercicio físico intenso. También, se recuerda que no hay que tirarse de cabeza en lugares de fondo desconocido, una práctica de riesgo que puede provocar graves accidentes. Sanidad recuerda que las personas con enfermedades contagiosas de transmisión por agua o dérmica no pueden acceder a la zona reservada a los bañistas y recomienda ducharse antes y después del baño.
Desde Cruz Roja nos recuerdan que 9 de cada 10 ahogamientos que se producen podrían haberse evitado con precaución.
La Consejería de Sanidad recuerda asimismo que todas las piscinas de uso colectivo, públicas y privadas, incluidas las de comunidades de vecinos de más de 30 viviendas, deben disponer de un servicio de socorrista.
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