La exposición muestra más de medio millar de piezas utilizadas en casos reales. En las vitrinas de esta muestra pueden contemplarse armas, equipos de grabación clandestina e intervención de comunicaciones, documentos y pasaportes falsos, o herramientas de cambio de apariencia. Todas han sido donadas por agentes encubiertos, espías e infiltrados. Entre las piezas más notables destacan equipos originales de la CIA, las armas utilizadas por Mikel Lejarza en ETA, o los equipos de escucha y grabación de los infiltrados de la STASI o el KGB.
La exposición estará abierta hasta el 28 de noviembre.
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