Para los colectivos que defienden la sanidad pública madrileña esta campaña supone un despilfarro de dinero público y una burla hacia la ciudadanía, que ve como cada vez se agravan los recortes, el deterioro y, en definitiva, el desmantelamiento y privatización en los centros y hospitales de la región. Por ello, critican que la Comunidad de Madrid se haya gastado casi un millón y medio de euros en una campaña propagandística, en vez de destinar esos fondos a los Programas de Prevención y Mejora de la Salud para los que estaban previstos.
Situación que enfada aún más si se tienen en cuenta los incrementos en las listas de espera, la reducción de 10.000 profesionales o la negativa a aplicar los tratamientos que necesitan los enfermos de Hepatitis C, como afirma Rafael Erguezábal, miembros de la Plataforma por la Sanidad Pública en la zona norte.
Una propaganda del PP madrileño que coincide con la campaña en periodo preelectoral. Por lo que los colectivos en defensa de la sanidad pública piden la dimisión de los responsables de este despilfarro de dinero de todos que, además, se burla de sus profesionales y pacientes.
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