Son diversas las posturas que pueden dañar espalda, cuello o brazos. Algunas de ellas son fáciles de evitar. Por ejemplo, algo muy frecuente cuando vamos en coche es colocar el brazo izquierdo sobre la ventanilla o algún elemento de la puerta del coche. Pues bien, al tener el punto de apoyo más alto de lo habitual pueden aparecer las denominadas tendinitis del supraespinoso.
Sentarse en la parte de delantera de la silla puede provocar lumbalgias. Algo que se soluciona fácilmente, tan solo con apoyar bien la espalda en el respaldo.
Es importante también no tener la silla de trabajo mal regulada para que los pies toquen el suelo y rodillas y cadera formen un ángulo de 90 grados.
Otras mala postura es flexionar el tronco al coger peso o repartir mal el peso. Para evitar perjudicar a la espalda se aconseja flexionar las rodillas al coger peso y repartir éste mejor a la hora de cargar bolsas o coger la mochila.
Algo que afecta especialmente a las mujeres son los bolsos en bandolera, un problema que repercute en la postura al caminar, por lo que hay que compensar de forma natural el peso que aporta.
Dormir bocabajo y con la cabeza ladeada no es nada recomendable, genera problemas respiratorios y tensión en el cuello. Tampoco se recomienda cruzar las piernas porque pude provocar dolores musculares.
Por último, se aconseja que la pantalla del ordenador no esté a un lado de la mesa de trabajo, sino de frente al trabajador para evitar problemas en el cuello.
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