En estos dos institutos, los estudiantes y familias se han implicado desde el principio en las protestas de los docentes contra las instrucciones de la Consejería de Educación para este curso escolar.
A propuesta de una de las madres del Instituto Sierra de Guadarrama de Soto, la AMPA aprobó por mayoría abrir una cuenta bancaria para costear las pérdidas económicas de los profesores por no asistir a clase. Los profesores ya han anunciado que no aceptaran ese dinero que finalmente se utilizará para actividades extraescolares o la compra de material para el centro como nos ha confirmado Salvador Menéndez, presidente de la AMPA.
Los padres de Soto se han ofrecido incluso para, mediante turnos, abrir la biblioteca del centro, ya que el aumento de horas lectivas hace imposible su apertura mantenida.
También en el Instituto Rosa Chacel de Colmenar Viejo las familias están realizando colectas para sufragar los gastos que genera la huelga, desde la compra de camisetas hasta el material necesario para la elaboración de las pancartas.
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