El “Kit Ron 1-G1” es un sistema de adaptación compuesto por materiales plásticos y aluminio que se incorpora a la culata de un arma corta haciéndola más grande y precisa. Sergio Ruiz de la Unión de Jefes de Policía Local defiende en una entrevista con nuestra compañera Pilar García, que este accesorio consigue aumentar la estabilidad y la precisión del disparo, incluso potencia la apariencia física ante una posible acción preventiva.
Según Ruiz, la adaptación de este dispositivo en la culata, no convierte el arma corta en arma larga pues afirma el miembro de UNIJEPOL, no llega nunca a alcanzar las longitudes establecidas por el reglamento.
El sistema que se está utilizando en numerosos países del mundo es aún muy novedoso pero Sergio Ruiz insiste en que su uso no supone ningún riesgo y no aumenta en ningún caso ni la energía ni la potencia del proyectil.
Ruiz insiste en que no es un arma prohibida ni en cuerpos de seguridad ni en fuerzas armadas, de hecho su venta es libre en el mercado. Su legalidad, eso sí, está sujeta a un debate en el ámbito administrativo. Las Comunidades Autónomas son las competentes en esta materia desde el año 1992, en el caso de la Comunidad de Madrid aún no se han fijado los medios reglamentarios de las policías locales. La falta de reglamentación durante este periodo ha permitido que las policías locales hayan planteado sus propias armas reglamentarias.
La Dirección General de Interior y Seguridad, que ya ha aprobado el uso de este dispositivo, está desarrollando el necesario proyecto sobre medios homologados o reglamentarios de las policías locales madrileñas, un proyecto que según Ruiz, está muy avanzado.
El miembro de UNIJEPOL insiste en que este tipo de dispositivos son muy necesarios para que los agentes locales puedan atender con mayor eficacia sus nuevas competencias en materia de seguridad ciudadana.
Municipios madrileños como Arroyomolinos, Alcobendas ó Alcorcón están evaluando este tipo de accesorios. También se han incorporado ya en otras comunidades autónomas como Canarias o Andalucía.
En Alcobendas, fue el Partido Socialista quién acuso al gobierno municipal (PP) de comprar dispositivos para la Policía Local considerado como “arma de guerra” por la Intervención Central de Armas de la Guardia Civil.
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