Hace algunos años la situación los buitres negros en Madrid era crítica, a punto de la desaparición, solo había treinta parejas en los años ochenta. Nada que ver con lo que pasa hoy en día cuando son tres veces más y la pasada primavera nacieron 57 nuevos pollos, y en estos momentos se está culminando el proceso de anillamiento y marcaje de todos para su seguimiento y control.
En la actualidad, la colonia de buitre negro en Madrid es la que ofrece mayor seguimiento en todo el mundo: el Valle del Paular, en Rascafría, y la zona de Valdemaqueda, son los lugares donde están establecidas las poblaciones más numerosas de este ave carroñera. Esta colonia de la Sierra de Guadarrama supone el 5% de la población europea.
Una especie que aumenta de forma lenta y continua. El buitre negro está incluido en el Catálogo de Especies en Peligro de Extinción de la Comunidad de Madrid, y es una de las aves más amenazadas de la región.
Cada año, en colaboración con SEO/BirdLife, se anillan casi todos los pollos que nacen en primavera. Este trabajo se desarrolla ahora, entre junio y julio, cuando los pollos tienen un desarrollo medio. Así se identifica a cada ejemplar para toda su vida, y a través de sus códigos se almacenan en las bases de datos. De este modo, los controles posteriores de estas aves aportaran información relacionada con esta población.
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