Para Joaquín Bosch, portavoz de Jueces para la Democracia, esta reforma “no soluciona los problemas de fondo”, porque las medidas que contempla se enmarcan en un “populismo penal”.
Desde la Asociación de Jueces y Magistrados Francisco de Vitoria, su portavoz, José Luis González Armengol, ve luces y sombras. “No se puede legislar a golpe de acontecimientos y aquí se incluyen medidas populistas, de oportunidad política, aunque también hay otras más pensadas y debatidas”, según ha manifestado.
Por su parte, Pablo Llerena Conde, portavoz de la Asociación Profesional de la Magistratura, asegura que si es cierto que se establece “una agravamiento de la respuesta penal del Estado ante el delito”, todo está sujeto a las diferentes concepciones de cada gobierno sobre la intensidad de las conductas penales.
Los tres portavoces se han pronunciado sobre algunos de los puntos más destacados de esta reforma, que por cierto, no contempla ningún cambio en la Ley del Menor. María del Mar Bermúdez, madre de la joven asesinada, Sandra Palo y una de las personas que más ha reivindicado la reforma de esta ley, se siente engañada por las promesas incumplidas al respecto del PP. En este tema, algunos jueces, como Pablo Llerena Conde cree debería establecerse una graduación de la sanción con relación a determinados delitos de menores.
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