Narciso Romero afirma que tras meses de lucha de los socialistas madrileños en defensa de la Sanidad Pública y la recusación reiterada al presidente de la Sala Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, Francisco Gerardo Martínez Tristán “por tratar de poner bajo su control todos los recursos contra la privatización de los hospitales” no podían quedarse quietos ante el pacto del PSOE a nivel estatal y el Partido Popular para darle la vocalía en el Consejo General del Poder Judicial.
Para Romero, Tomás Gómez demuestra una vez más una coherencia que debería haber estado presente en otros momentos y que hubiera evitado la perdida de miles de votos y de credibilidad del partido en todo el país.
Romero insiste en que si Martínez Tristán es para los socialistas “imparcial y subjetivo” no puede estar, con nuestro apoyo, como miembro del órgano de gobierno de los jueces en España.
Comentarios