Esa voz aguda de Adam Levine, esa guitarra con toques funky, esos destellos electrónicos… Es el estilo inconfundible de los Marron 5, que llevan desde 2002 perfeccionando hasta llegar a cotas reservadas a los más talentosos artistas. “Sugar” es uno de los cortes que encontramos en “V”, su último disco, del año pasado, quizás el mejor y más completo. La verdad es que no parecen los mismos que sonaban en 2002.
“Harder to Breathe” era el single con el que se daban a conocer en el disco “Song about Jane”. Una canción donde el rock predominaba claramente sobre otros estilos. Pero no era la tónica general de un disco con el que reventaron con temas como “This Love” o “She will be loved”, sus dos grandes éxitos del año 2004, curiosamente dos años después de la publicación del disco.
Esto ya sí, es el sello de la casa de Levine, las voces agudas. Los temas eran absolutamente comerciales, gran cualidad en cuanto a que la melodía se le quedaba a uno en la mente durante todo el día. Desde entonces les costó volver a encontrar éxitos similares a estos, a pesar de que ni siquiera llegaron al número uno con ellos. Sí lo harían en 2007 con su segundo disco, “It Won"t Be Soon Before Long”, y la canción “Makes Me Wonder”, que sin embargo no acababa de superar a sus predecesoras.
Tardaron en volver a las tiendas de discos. Lo hicieron en 2011 con “Hands All Over”, donde no recolectaron grandes himnos, de hecho artísticamente no fue lo que se esperaba de ellos. Salvo por una joya, que marcaría ese rollo funky-electrónico-discotequero, de la mano además de Christina Aguilera. “Moves Like Jagger” nos obligaba a poner el culo de pollo del cantante de los Rolling Stones para movernos irrefrenablemente por la pista.
Gracias a este single, que no fue el primero del disco, intentaron aprovechar la inercia con otro gran trabajo, “Overexposed”, donde retomaron ligeramente esas guitarras más rockeras, sin exagerar, pero cosechando más éxitos. “Payphone”, con Wiz Khalifa, era la primera de sus balas.
Aquel disco también contaba con otros temas que probablemente quedarán en el repertorio de Maroon 5 durante muchos años. Es el caso de “One more night”, donde explotaban especialmente el ritmo en los bafles de todos los equipos de música.
Y así llegamos a “V”, un título poco común para un álbum, aunque muy lógico porque se trata del quinto de la banda. Es el que han desgranado estos días en España y es con el que no se apean de ninguna lista de éxitos desde hace casi un año. Nos despedimos con una joyita, “Animals”, potente, divertida y pegadiza. Poco más se puede pedir…
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