Este registro oficial es uno de los aspectos de las múltiples situaciones que aborda esta ordenanza, redactada para facilitar, garantizar y proteger la convivencia de ciudadanos y mascotas. Se trata de armonizar la labor de compañía, ayuda y seguridad que prestan los animales con el derecho legítimo a la seguridad de las personas; además de garantizar y vigilar la salud pública que debe ejercer el Ayuntamiento, como explica la concejala de Salud, María Luisa Suárez.
La ordenanza comprende 19 capítulos y varias disposiciones que derogan normas locales anteriores. Con un total de 43 artículos, regula la tenencia de animales en espacios privados y públicos, la existencia de censo y registro de animales; así como la circulación, transporte y control sanitario de animales con un apartado dedicado al comercio y propiedad de animales exóticos o silvestres, entre otras cuestiones.
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