Miguel podría ser cualquiera. Una persona que apuesta todo por su negocio para sacara su familia adelante, pero la crisis arrasa con su proyecto y su vida. Tras cerrar su empresa, negociar la salida de sus trabajadores, pasar por un concurso de acreedores y sufrir una expropiación de su vivienda que ahora está en subasta, Pedrosa no se rinde e intenta salir de esta situación defendiendo los derechos de quienes padecen la exclusión social: 350.000 familias que con 400 euros al mes no pueden negociar con el banco. Ellos son sólo víctimas de la gestión de la banca abalada por los políticos, como ha explicado ante los micrófonos de SER Madrid Norte, de aquí que sea necesaria la dación en pago con carácter retroactivo.
Con gesto amable, tranquilo y optimista, Miguel Pedrosa ha confesado que esta situación le está brindando la oportunidad para cambiar sus prioridades y estar más unido a su familia, además de reflexionar para luchar activamente. Algo q ue está reflejando en su libro “El éxito del fracaso” donde aborda que no hay que sentirse culpable de nada ya que el que ha fracasado es un sistema dominado por la banca. Y lo más importante: que de todo se sale.
Humanista e idealista, Pedrosa no encuentra una salida en otros partidos políticos que le convencen en las ideas pero no en las formas. Aunque ve una oportunidad de futuro en los movimientos sociales a través de las redes. Desde aquí continuará, valiente y sin vergüenza, mostrando su situación y luchando para salir de ella. Quizás la unión haga la fuerza.
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