Incluso a la hora de elegir las vacaciones valoramos que el alojamiento tenga conexión a Internet. Y si no, accedemos a la Red en el exterior por Wifi o mediante dispositivos móviles de nueva generación.
No queremos, o no somos capaces, de desconectarnos de las redes sociales, dejar de prestar atención al correo electrónico o seguir al tanto del trabajo.
Lo dice un estudio de la compañía Brocade, según el cual el 95% de los europeos reconoce que se sigue conectando a Internet durante sus vacaciones.
La mitad de los encuestados dice conectarse al menos una vez al día, la mayoría a través de portátiles y dispositivos ‘tablet’ o ‘smartphone’; el 40% dice hacerlo para no estar desconectado de las redes sociales; y aunque también lo usamos como herramienta de ocio y accedemos a páginas de entretenimiento, uno de cada tres encuestados reconoce que se conecta para temas de trabajo.
El lugar desde el que conectarse es lo de menos hoy en día. El 25% de los encuestados dice haberlo hecho desde la playa, e incluso un 4% asegura haber accedido a Internet desde la selva.
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