Pasos de cero es uno de los últimos singles de Pablo Alborán, esta estrella malagueña cuyo brillo va a más cada vez. Su disco Terral marcó un enriquecimiento en su repertorio. Escuchen la riqueza de ritmos, el aire latino, la energía… Algo que no estaba tan presente cuando un vídeo en YouTube encumbraba a este, entonces, anónimo joven bien parecido.
El bombazo fue absoluto. Pablo pasó en menos de un año de ser poco más que un desconocido a ser número uno en todas las listas del año 2011, premiado en todas las galas y agasajado por su música. Pero el disco no dejaba de ser un poco plano. Por eso decidieron darle una vuelta con un delicioso directo de donde se extrajo el single “Perdóname” con la cantante de fados portuguesa Carminho.
Su segundo disco llegó en 2012, casi sin asimilar el éxito anterior. No hubo mucha evolución y se apostó por repetir la fórmula del éxito en los singles: canciones lentas, con algo más de arreglos de cuerda, pero muy íntimas. “Tanto” fue la tarjeta de presentación.
Pero aunque una buena parte del disco seguía con ese aire melancólico, musicalmente muy desnudo para resaltar la cercanía de la voz de Pablo, empezaron a incluir cortes que buscaban tener más potencia en directo, “desencasillar” dentro de lo posible al malagueño. “Éxtasis” era uno de esos intentos; también “Deshidratándome”.
Sin embargo ese camino, un poco más revolucionado, se ha quedado de momento en una posibilidad. Muy interesante, pero que no acaba de doblegar al estilo de cantautor del amor elevado a la máxima potencia que sigue cosechando éxitos como churros. “Por fin” ha sido también uno de sus últimos temas, del disco “Terral”, con el que sigue recopilando discos de platino (ya va por unos 36), algo que no hacen ni si quiera tras décadas de carrera. Escuchen que los arreglos de cuerda, lejos de irse, han aumentado y parecen inseparables de la voz de Alborán. Con ellos cerramos un breve repaso a una carrera que no parece que vaya a aflojar.
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