Cuando pensamos en detectives, todos imaginamos la típica imagen del hombre con gabardina y sombrero, que lleva una lupa en su mano, o camuflado detrás de su periódico agujereado para observas tras él. Lejos de nuestra imaginación alimentada por el cine y la literatura, la profesión de detective es un servicio muy útil para muchos casos en los que podamos necesitar su ayuda. Hoy conoceremos más sobre ello gracias a Sarah Baglietto, gerente de Glico Detectives.
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