La madre llamó presa de los nervios al teléfono regional de emergencias. Varias dotaciones municipales de Policía se trasladaron hasta el lugar. Un agente decidió entonces descolgarse por una terraza y entrar en el domicilio donde se encontró al niño plácidamente durmiendo. Lo cierto es que finalmente todo se quedó en un susto, pero durante algunos minutos se vivieron momentos de gran tensión al no saber cómo podía encontrase el bebé.
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