La polémica está servida. Incluso en países como en Francia este debate ha dividido enérgicamente a la población y los centros educativos. Aquí, también se empiezan a cuestionar los supuestos beneficios de las tareas extraescolares. Bien porque es una repetición de lo ya trabajado en clase o porque al alumno necesita repartir su tiempo en diferentes actividades.
De todo ello se ha hablado en una charla coloquio organizada por la FAPA de Alcobendas donde se expusieron los efectos negativos de sobrecarga de trabajo e incluso ansiedad que produce el excesivo número de deberes. Incluso se alertó ante la situación de que cada vez se mandan más tareas escolares y a una edad más temprana. Lo que ha provocado que las familias se pregunten su eso es beneficioso para sus hijos, además de condicionar la vida familiar, como expuso Miguel Martínez, traductor del libro “El Mito de los Deberes”.
Hay división de opiniones, tanto entre el profesorado como entre las familias. De hecho, algunos estudios demuestran que cuanta más experiencia tienen los profesores menos deberes mandan. Incluso pareciera que responden a una carencia del profesor en el aula, porque se completa lo no abordado en clase.
Si nos comparamos con otros países en Australia o Canadá la media es de 3 horas semanales, mientras que en Navarra los deberes ocupan unas 9 horas a la semana. Asimismo, en el libro aparecen ejemplos ilustrativos como en el caso de China, donde los niños deben hacer actividades complementarias fuera de clase como ir a biblioteca, actividades deportivas, colaborar en las tareas de casa y dialogar en casa como parte del trabajo escolar.
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