Cada vez son más los vecinos que denuncian en la Oficinal Municipal de Información al Consumidor los contratos de suministro doméstico y sus condiciones, la facturación o la revisión de las instalaciones. Sus quejas apuntan a errores en las facturas, ofertas comerciales oscuras, contratos incomprensibles o su régimen de inspecciones. Por ello, la OMIC recomienda informarse previamente y adoptar pequeñas precauciones, como analizar las ofertas comerciales, verificar los datos de facturación y consumo, así como valorar otras alternativas comerciales.
Asimismo, sugiere revisiones periódicas en las instalaciones e informa a los usuarios de la importancia de conocer si los instaladores están autorizados por la Dirección General de Industria, Energía y Minas, obligados a mostrar su carné oficial y figurar en el registro de este organismo. En caso de no poder comprobarlo, la OMIC recomienda impedirles el paso a la vivienda, del mismo modo que si la empresa suministradora no le ha avisado con anterioridad de la visita, o bien el usuario de gas butano no ha contratado la inspección con anterioridad a la visita.
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