El aeropuerto de Barajas, uno de los objetivos de los traficantes de droga, ha vuelto a ser el escenario de una operación exitosa frente a los denominados “boleros”. El Grupo de Estupefacientes ha detenido estos últimos días a siete personas que trataban de introducir en España más de siete kilos de cocaína que se habían escondido en el organismo para burlar los controles de seguridad.
Procedentes de Buenos Aires, Sao Paulo, Santo Domingo, San José o Guayaquil, cada uno de los arrestados llevaba en su cuerpo un kilogramo de droga en forma de bolas.
Comentarios