Los dos hijos del matrimonio se han acogido durante la sesión al derecho a no declarar. Además, han dejado en manos del ministerio Fiscal, que pide al procesado 19 años y medio de cárcel, la acusación. Hasta ahora, la acusación particular que representaban los hijos pedía 25 años de prisión a su padre. La hija ha asegurado que su motivo para retirar la acusación es que tiene miedo a una posible venganza de su progenitor, mientras que el hijo ha reconocido que sí le perdona.
El novio de la joven, sin embargo, sí ha confirmado que el acusado amenazaba presuntamente por teléfono a la víctima con “quemar a todos con gasolina” en caso de que no volviese con él. Tras 33 años juntos la pareja se estaba separando y el hombre tenía una orden de alejamiento. Varios testigos, además, confirmaron que vieron aquel día al acusado con un cuchillo tras agredir, presuntamente, a su mujer.
En el primer día del juicio, el acusado aseguró que únicamente quería arreglar las cosas. Con ello trató de justificar que el 7 de marzo de 2011 acudió a la casa de su todavía mujer. Asegura que llegó a la vivienda sin ningún arma y dice que actuó en defensa propia. Según su declaración, su ex pareja le golpeó con un candado al tiempo que le amenazaba con un cuchillo. El fiscal le acusa de delitos de asesinato y quebrantamiento de medida cautelar y le pide que indemnice con 120.000 euros a cada hijo. Según su relato, el la madrugada del 6 al 7 de marzo de aquel año se personó en la casa de su mujer, cortó la valla que rodeaba la vivienda y allí la espero, abalanzándose sobre ella y clavándole un cuchillo en, al menos, 6 ocasiones.
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