Desde el lado madrileño de la frontera con Guadalajara los Consistorios de Ambite y Orusco, las localidades más cercanas, mantienen una postura institucional conjunta contra la ubicación del cementerio nuclear, a pesar de estar gobernados por distintos partidos políticos.
Esta negativa se ha traducido en los últimos meses en concentraciones, escritos y la colocación de una pancarta en el Ayuntamiento de Ambite en la que se leía un ‘No al cementerio nuclear’.
La alcaldesa de esta localidad, Ángela García, del Partido Popular, ha indicado que el ser de distinto color político no ha impedido que los municipios hayan creado un frente común contra el cementerio nuclear del que, por cierto, ha asegurado que nadie les ha informado ni pedido opinión.
Mientras tanto, los vecinos de Ambite y Orusco de Tajuña se dividen entre los que se declaran totalmente contrarios al cementerio nuclear en la región y los que no lo verían con malos ojos si sirviera para crear puestos de trabajo en la zona.
En este sentido, el alcalde de Orusco, Adolfo Rivas, ha asegurado que la creación de empleo en estas localidades es, desgraciadamente, una utopía, aunque si ha afirmado que en lo que se verán afectados será en la pérdida del turismo; una fuente importante de ingresos y empleo para la zona, que se encuentra encuadrada en la Comarca de las Vegas y la Vía Verde del Tajuña.
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