En este mes de septiembre, la Unidad Móvil de Intervención en Duelo y Crisis y el Centro de Escucha de San Camilo han recibido diversas demandas para el desplazamiento y atención a personas con situaciones de pérdidas diversas, en varias de las cuales había ideación suicida o había habido tentativas de ello.
Cada año unas 3.500 personas se suicidan en España, aunque por cada caso consumado hay más de una decena de tentativas; es decir, alrededor de 35.000 personas lo intentan. Mientras que la tasa más alta de suicidios se da en hombres de más de 60 años, con depresión mayor y que están en situación de desamparo por vivir solos o estar viudos, las tentativas se dan en mujeres de 35 a 55 años. Aunque los datos que más sorprenden es el aumento de suicidios entre los 25 y 34 años, lo que se convierte en la segunda causa de muerte en esta franja de edad.
Datos de los que hay que hablar abiertamente y rompiendo mitos, porque el suicidio se puede prevenir, ya que 9 de cada 10 personas que se suicidan ya habían demostrado un cambio de conducta y habías hablado de su propia muerte, como señala Marisa Magaña, responsable de la Unidad de Duelo del Centro de Escucha Los Camilos en Tres Cantos.
El suicidio es un duelo difícil de aceptar para las familias porque se suman sentimientos de rabia, culpa y de negación. Así, desde esta unidad se ofrece un programa de atención y acompañamiento al superviviente, que no entiende por qué le ha abandonado la persona amada.
Desde el Centro de Escucha San Camilo se atienden 600 personas al año de forma gratuita, la mayoría de ellas porque solicitan apoyo y acompañamiento durante el duelo. El año pasado se atendieron 40 personas que solicitaron dicha ayuda ante la pérdida de un ser querido por suicidio. Sus voluntarios están específicamente formados, especialmente para casos complicados, ya que han cursado el Master en Duelo que imparte el propio centro y que es el único que se hace en España.
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