Toda España está contra ETA y los municipios muestran su repulsa más tajante con actos simbólicos de homenaje a las nuevas dos víctimas de la barbarie. Si hace tres días la banda terrorista intentaba consumar una matanza en Burgos, ayer asesinaba a dos guardias civiles en Calviá, en Mallorca. Los agentes Carlos Enrique Sáenz de Tejada y Diego Salvá Lezaun unen sus nombres a la sanguinaria trayectoria de los terroristas, que en sus 50 años de sinrazón suman 823 víctimas mortales y miles de damnificados. Una vergüenza que la ciudadanía y las instituciones democráticas quieren combatir desde la unidad de todas las fuerzas políticas. La zona norte de Madrid condena unánimemente cada crimen de ETA y hoy el Ayuntamiento de Alcobendas ha guardado cinco minutos de silencio en la Plaza Mayor con la presencia de cientos de vecinos y autoridades. Ramón Cubián es el alcalde en funciones.
De nuevo, ETA aparece en la escena del crimen. 50 años de barbarie que la justicia y la unidad de todos los demócratas pondrá en su sitio.
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